En las primeras etapas del duelo, puedes tener una sensación de irrealidad e incredulidad, esto puede hacer que te sientas insensible. Algunas personas siguen como si no hubiera pasado nada o se ocupan de tareas administrativas como cancelar cuentas personales, cambiar cuentas bancarias, cambiar cuentas de redes sociales u organizar el funeral, mientras que otras están tan desconcertadas que realizan sus actividades diarias aturdidas. 

Sin embargo, cuando la conmoción inicial pasa, nos damos cuenta de nuestra nueva realidad. Algunas personas sienten una amplia gama de emociones desde el principio, pero para otras estos sentimientos pueden tardar en desarrollarse.  

La mayoría de los dolientes, generalmente, quieren superarlo rápidamente, sin embargo, el duelo es un proceso lento. Esta lentitud es necesaria.

A través de este proceso, expresas tus sentimientos causados por la pérdida. También, expresas tu protesta, así como tu deseo de cambiar lo sucedido. Esta es una respuesta normal. Además, te hace expresar los sentimientos devastadores que has experimentado debido al impacto de la pérdida.

El primer año, para la mayoría de los dolientes, es una montaña rusa emocional.

Después del primer año

La gente que te rodea suele volver a la normalidad, puedes sentir que hay menos espacio para hablar de tus sentimientos.

Hay ciertas fechas como los aniversarios, los cumpleaños, la Navidad y otras festividades que pueden ser muy dolorosas y, aunque haya pasado más de un año, es posible que sientas las emociones con la misma intensidad que al principio.

Es importante recordar que, con el tiempo, te sentirás mejor y más capaz de afrontar esta situación. Esto no significa que lo hayas superado por completo, sino que es posible empezar a encontrar placer en la vida de nuevo, sin dejar de recordar y echar de menos a la persona que has perdido.

Después de varios años 

A medida que pasa el tiempo, la mayoría de las personas se adaptan a su dolor. Algunas experiencias lo seguirán desencadenando (como ciertas películas, canciones u olores), pero es probable que crezcas en torno a estos sentimientos y encuentres espacio para otras cosas en tu vida.

La metáfora de Lois Tonkin sobre el crecimiento en torno al duelo es una forma práctica de pensar en su duración. El dolor no desaparece del todo, y a veces los sentimientos pueden ser igual de intensos que cuando te enteraste por primera vez. Pero, con el tiempo, a medida que empiezas a crecer en torno a tu dolor, estos sentimientos aparecen con menos frecuencia. Esto significa que tu vida empezará a tener espacio para otras cosas, y poco a poco volverás a hacer lo que te gustaba. No es que nuestro dolor se reduzca, sino que aprendemos a crecer en torno a él.

Date permiso

Una larga recuperación no significa que tu amor haya sido más grande o pequeño. Reaccionarás y te recuperarás del duelo, al igual que en otros momentos de la vida. La recuperación puede durar años, por lo tanto, no hay un calendario establecido para la recuperación. 

Sin embargo, pueden surgir problemas cuando no te das suficiente tiempo para recuperarte. Tu afán por hacerlo puede ser tu mayor causa de estrés.  

Debes darte permiso para llorar. Vas a seguir estando en duelo. La diferencia es que si no te das permiso, estarás luchando constantemente contra todos tus sentimientos. Si te das permiso, puedes relajarte y no tener que luchar contra tus mismos sentimientos. 

Luchar contra uno mismo solo te causa más angustia y dolor. Te quita la energía que necesitas para estabilizarte. Incluso puedes empezar a actuar como si todo estuviera bien, mucho más antes de estarlo. Actuar de esta forma no es buena idea. Hasta es posible que tengas una recaída más adelante.

Te darás permiso para llorar cuando reconozcas la necesidad hacerlo. El duelo es la forma natural de procesar la pérdida de un ser querido, no es una debilidad. Es tan natural como comer cuando tienes hambre o dormir cuando estás cansado. Es la forma que tiene la naturaleza de sanar un corazón roto. 

Cuando estás en duelo, estás viviendo una de las experiencias más dolorosas de tu vida. Lo que estás afrontando te hará sentir vulnerable, agotado y débil. La mejor respuesta para ti en este momento es centrarte en ti mismo y en nadie más. Necesitas cuidarte, esto no es un acto egoísta. 

El duelo no es un enemigo; es el proceso natural de atravesar el dolor

Mucha gente va a tratar de intentar “arreglarte”. Pero no necesitas que te arreglen, porque no estás roto. Algunos se van a impacientar con tu duelo. Recuerda que no estás sufriendo para que los demás se sientan cómodos. No es para su beneficio, sino para el tuyo. 

Es una forma de decir: “No”

No te preocupes por herir a otra persona en este momento. Puede que haya perdido a la misma persona, pero, ahora mismo tu prioridad es cuidarte. Probablemente estés luchando por reunir suficiente energía. Es posible que necesites recibir la ayuda de los demás en lugar de darla.

Para sentirte menos presionado, puedes imprimir una tarjeta o carta que explique lo que estás sintiendo, para poder dársela a alguien que te pregunte por esto, también, puedes publicarla en tus redes sociales. 

Seguramente te habrán preguntado: “¿Ya lo has superado?”. O, peor aún, puede que te hayan dicho: “¡Pues ya deberías haberlo superado!”. Pero, el duelo no se supera, se aprende a vivir con él. Aprenderás a integrarlo en tu vida.

A veces hay periodos intensos de tristeza que nos abruman, incluso años después de la muerte. Puedes creer que estos momentos salen de la nada, pueden ser preocupantes y dolorosos. Algo tan simple como una canción, un sonido, un olor o una frase pueden provocar estos terribles momentos.

Sentirás algo de dolor durante el resto de tu vida. Aunque, ya no dominará tu vida, pero siempre estará ahí, en el fondo, recordándote el amor que aún sientes por la persona que perdiste. 

Necesitarás buscar a otras personas que sí sean capaces de apoyarte sin juzgarte, si las personas más cercanas a ti no son capaces. Por lo general, la capacidad de apoyar sin juzgar está más desarrollada en las personas que están dispuestas a estar contigo durante este momento difícil y en las que han experimentado anteriormente el duelo. Experimentarás la forma más saludable de procesarlo si tienes a alguien que sabe cuáles son las ideas erróneas sobre el duelo.

En mi opinión, las siguientes ideas son importantes :

-El duelo es algo natural. 

-Te hará sentir una amplia variedad de pensamientos y sentimientos diferentes. 

=Te afectará físicamente, emocionalmente, cognitivamente, socialmente e incluso espiritualmente. 

-Necesitas sentirlo para procesarlo. 

-Es probable que el dolor aumente antes de que disminuya. 

-Será imprevisible y probablemente no tenga ningún orden. 

-El duelo no se supera; se aprende a vivir con él. 

-Necesitas a otras personas que te ayuden a superarlo. 

-No siempre tendrás el mismo malestar.